jueves, 28 de marzo de 2024

Puertas del Mar

 

La Puerta del Mar no fue una sino dos, denominadas realmente Puertas del Mar, una de entrada y la otra de salida. Estaban formadas por dos grandes bóvedas decoradas con portadas de mármol blanco por la parte exterior del muelle. Su frontis estaba formado por dos columnas en cada una, de estilo toscano de mármol blanco, y un capitel en cuyo centro se veía el escudo de armas de la ciudad. Entre cartelas estaba la inscripción  en latín “DOMINUS CUSTODIAT ENTROITUM ET EXITUM TUUM. PSAL. 120”.  Salmo 120-8 “Que el señor te guarde en la entrada y en la salida.” Las bases de las columnas estaban decoradas con escudos que representaban a Hércules con sus dos leones.

Fueron proyectada sen 1718 por Vicente Acero, ejecutándola después Torcuato Cayón. Las puertas se cerraban a la hora de la oración hasta 1863, cuando se amplió el horario una hora más,  hasta las diez de la noche. Quedaron abiertas definitivamente en 1900. Por la  parte de San Juan de Dios no tenían una arquitectura especial sino como todas las naves: austeras y sin decoración.

Fueron derribadas en 1913 sin apreciar su importancia y valor. Ni se planteó la opción de conservarlas. El mármol de la portada principal permaneció muchos días tirado en la calle y allí se perdió la pista de sus artísticas columnas, que en su día fueron las puertas de entrada a Europa no solo de personas de distintas lengua o razas, y mercancías, sino también de pensamientos, ideas,  sentimientos, músicas…

No se sabe donde fueron a parar las Puertas del Mar. Pudieron ser compradas por particulares o destinadas por el propio Ayuntamiento a otras obras.

En una guía de la ciudad posterior a 1907 dice que las parte nobles de las Puertas del Mar fueron desmontadas y guardadas en los almacenes de Vías y Obras que tenía el Ayuntamiento en el Campillo de San Dimas para su posterior reconstrucción. No volvieron a montarse y probablemente se desperdigaron con diferentes usos más o menos honestos.

El 7 de noviembre de 1924 se publicó en Diario de Cádiz un artículo firmado por Ventura F. López hablando de que podían verse desde la Torre del Moro en la Segunda Aguada ocho columnas de mármol que bien podían ser griegas o romanas. Dos días después rectificaba su afirmación y aclaraba que las columnas  procedían de las antiguas Puertas del Mar.

En el Museo de las Cortes de Cádiz  se conservan varias piezas en las que aparece un Hércules labrado y que bien podrían pertenecer a restos de las Puertas del Mar. Poco más se conoce de los restos de éstas, que fueron derribadas pensando que aquello solucionaría la crisis que atravesaba la ciudad.

En esta fotografía de las Puertas del Mar en 1904, vemos los almacenes anexos a la muralla a la izquierda y a la derecha el curioso bar que entre las dos puertas se ubicaba. Las inscripciones sobre las puertas que protegían por la mano de Dios a quienes entraban por la de la izquierda y salían por la de la derecha. También es muy curiosa la garita flotante justo en el centro.


Con el paso del tiempo se puede decir sin duda que aquello fue un error. Podrían haber sido un reclamo turístico e icono de la ciudad. En cualquier caso, de mejor gusto que algunos mamotretos situados cerca de donde estuvieron.

No hay comentarios:

Publicar un comentario